A veces tenés algo que decir
-Viste como es esto. A veces, tenés ganas de decir algo y no tenés a nadie que te escuche. A veces, tenés ganas de tener un auditorio lleno de gente para que esté atenta a lo que tenés que decir porque te parece lo más importante del mundo y, en cambio, estas ahí, más solo que un perro y con la radio como única compañía.